jueves, 27 de febrero de 2014

Virginia Woolf y la miserable muerte

    A Noemí

   La muerte es sencilla y miserable. Aún recuerdo los pañuelos de papel sobre la piedra. Mi abuela los doblaba una vez que dejaba de llorar para seguir cocinando. Mi padre acaba de morir. Aunque no fuese su hijo, habían compartido el mismo techo. La muerte está cargada de símbolos que ahora descifro como una arquitectura de la vida que se fuga y desaparece, porque es necesario olvidar para resistir el tiempo que nos queda. A veces necesito esa agilidad que encuentro en la prosa de Virginia Woolf para darme cuenta de que la escritura es más veloz, más efusiva, que la vida que emprendemos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Tu Opinión es Importante, Deja Tu Comentario: