De los rostros que esperan se encuentra el del padre. De los rostros que esperan al otro lado, confusos, recuerdo el de un niño. Una canción de Jacques Brel repite el mismo verso una y otra vez. Me esperan en las habitaciones y las fanfarrias, afuera, se detienen al paso de los vigilantes. De los rostros que esperan poco más sé, salvo que se ofrecen como roedores suicidas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tu Opinión es Importante, Deja Tu Comentario: